sábado, 20 de enero de 2018
miércoles, 17 de enero de 2018
LOS TERCIOS
LOS TERCIOS
1. ¿Origen de los Tercios?
Aunque fueron oficialmente creados por Carlos I, tras la reforma del ejercito, como guarnición de las posesiones españolas en Italia y para operaciones expedicionarias en el Mediterráneo, sus orígenes se remontan probablemente a las tropas de Gonzalo Fernandez de Córdoba en Italia. Con estas tropas españolas asentadas en Italia, Carlos I en sus ordenanzas de 1534 y 1536 organizaba su ejercito en tres tercios: uno en el reino de Sicilia, otro en el ducado de Milán y otro en el reino de Nápoles. En realidad, se comenzaron a gestar en el península. Durante el reinado de los Reyes Católicos y a consecuencia de la guerra de Granada, se adoptó el modelo de los piqueros suizos, poco después se repartían las tropas en tres clases; piqueros, escudados (espadachines) y ballesteros mezclados con las primeras armas de fuego portátiles (espingarderos y escopeteros). No tardaron mucho en desaparecer los escudados y pasar los hombres con armas de fuego de ser un complemento de las ballestas a sustituirlas por completo. Las victorias españolas en Italia frente a los poderosos ejércitos franceses tuvieron lugar cuando todavía no se había completado el proceso.
2. ¿Armas de los Tercios?
Canción de los tercios
Disparo
-Arcabuz. Fueron aumentando su número de ser una tercera parte de los efectivos a principios de sigilo XVI hasta suponer el 80% a finales de siglo. El arcabuz era un arma de fuego de un tamaño de 90 y 130 cm ( un peso de 7 kg), que disparaba proyectiles de 19 a 30 mm de diámetro. A través de un sencillo mecanismo de disparo, los proyectiles salían a una velocidad de 200 metros por segundo, aunque, al tratarse de un arma muy imprecisa, su alcance efectivo no sobrepasaba los 30 metros en el mejor de los casos.
Los arcabuceros españoles eran muy valorados por su disciplina. Incontables son las ocasiones en la que una descarga de proyectiles, procedente de una improvisada formación, determinó una batalla en curso.
Las 12 cargas que los arcabuceros portaban sobre el hombro, y que luego emplean para realizar las recargas, recibían el nombre de los 12 Apóstoles
-Mosquete. El Duque de Alba, fue el primero en introducir mosquetes en los Tercios de Flandes, ante los problemas que arrastraban los arcabuces. El mosquete permitía mucha mayor distancia de tiro, unos 200 metros y era efectivo a 50 metros, también tenía sus contras: su peso era de 10 kg y su longitud de 125 a 150 cm, lo cual obligaba al soldado a prescindir del morrión, "por eso se hizo tan popular el gorro de mosquetero" y a emplear una horquilla para disparar el arma. Su elevado coste hizo imposible la ambición de sustituir todos los arcabuces, pero su número no dejo de aumentar durante todo el periodo-
Armas de asta
-La pica. Si hay un arma que representa el espíritu de los Tercios esa es la pica. A mediados del siglo XV las infanterías europeas recuperaron las lanzas para el combate. La pica moderna, tumba de la caballería medieval, tenía una envergadura de 5,5 metros y cuya longitud era mucho mayor a 22 pies.
Las picas españolas se fabricaban, preferentemente con fresno vizcaíno -de gran flexibilidad- y tenían un peso de 5 kg.
Los mercenarios suizos fueron los primeros en recuperar la pica en escuadrones compactos, sin embargo los tercios no eran una unidad de combate sino de encuadramiento, con capacidad para fragmentarse en un sinfín de variedades.La pica encajó al dedillo en la Península Ibérica donde la infantería gozaba de una larga tradición.
Todo nuevo soldado de los tercios, los bisoños, entraban como pica seca, lo cual implicaba portar pica sin ningún tipo de protección. Con el paso de las campañas, el bisoño se iba haciendo con más equipamiento e incluso podía as pirar a portar arcabuz si quedaban plazas vacantes.
Hasta su progresiva desaparición -sustituidas por bayonetas- las picas obligaron a replantear las prestaciones de la caballería pesada, que había quedado solapada bajo un bosque de picas.
-La semipica. Idéntica a su hermana mayor, pero de menos longitud, su uso quedaba reducido a las primeras filas, y los tercios embarcados los cuales tenían que combatir en espacios muy estrechos.
-Otras armas de asta. Una gran variedad de armas de asta, con diferentes nombres según la "cabeza", quedaban reservadas para el uso y distinción de los oficiales y suboficiales. El capitán portaba una jineta terminada en una hoja corta ovalada, adornada con una borla con flecos y lazos, que recibía el nombre de esponton. Los sargentos portaban alabardas siempre con un lado de hacha de filo curvado -para distinguir su estatus-. Por su parte, los cabos podían llevar partesana -alabarda modesta sin adornos-.
La alabarda también era usada por la guardia del maestre de campo y del propio general. De hecho durante siglos fue el arma preferente de las guardias reales de toda Europa.
Armas de combate cuerpo a cuerpo.
-Espada ropera. Cuando el fuego y las picas se hacían a un lado, prendía el baile de aceros. Llegado el choque de escuadras, los castellanos hábiles espadachines, muchos ungidos en las calles de Madrid, podían marcar la diferencia entre la victoria y la derrota. Para su uso se requería de una alta dosis de vista, agilidad y destreza.
A diferencia de las espadas medievales, diseñadas para cercenar miembros, las del periodo renacentista eran ligeras y se empleaban para batirse, en duelo. La lucha se efectuaba de perfil para reducir el blanco y exigía mucha movilidad. Por ese mismo motivo, en vez de contar solo con gavilanes -la forma de cruz de las espadas medievales-, tenían un tazón o cazoleta que reducía el peso. Precisamente estos tazones, objeto de ornamentos y figuras talladas convertían en obras de arte a muchas de esas espadas. En el caso de los gavilanes usados a partir del siglo XV se aprecia una reducción de peso y tamaño.
Las espadas toledanas tenían fama mundial; asimismo, se hacían excelentes aceros en Zaragoza, Calatayud, Cataluña, Bilbao, Segovia y Valencia.
En sus orígenes, los tercios llevaban un 20% de soldados armados con rodela y espada; la tendencia fue a suprimir la rodela y a equipar a todos los soldados -arcabuceros, mosqueteros y piqueros- con espadas roperas.
-Vizcaína."Se baten espada en mano, no retroceden jamás; paran el golpe con el puñal y cuando hacen con él el gesto de tirar al cuerpo debéis desconfiar de la cuchillada, y cuando os amenazan el cuerpo". Los soldados españoles acostumbraban a portar espada ropera en una mano y una daga mediana en la otra. En concreto, la daga usada por los españoles era de hoja triangular y con la empuñadura protegida por un triángulo de metal abombado en forma de vela.
3¿Que vestimenta tenían los Tercios?
ROPA
Botas: Muy populares entre los soldados por su comodidad y resistencia.
Camisa: Los cuellos a la balona (la segunda foto) estaban muy de moda, las camisas de cuello recto tan populares . Los acuchillados son mas característicos del XVI que del XVII.
Casaca: La casaca suele ser en este periodo mas propia de oficiales y gente de calidad, siendo una especie de chaquetón largo con amplias mangas.
Chambergo/sombrero de ala ancha: Este tipo de sombrero de ala ancha que en su forma mas modesta y simple se llamaba capelina y que solía llevar enormes plumas de colores y hebillas estaba muy a la moda en la época. Protegía del sol, quedaba muy bravo y además no era mala protección para la cabeza durante el duelo ya que estorbaba bastante a las cuchilladas.
Coleto: Prenda destinada a la protección podía estar hecho desde piel cruda hasta ante.
Cuera: La cuera fue la prenda sustituta del gambesón durante el siglo de Oro. Hecha de ante o seraje se portaba bajo la armadura para llevarla de forma mas cómoda, aunque era por si sola una muy buena opción defensiva para llevar a la guerra.
Jubón/ropilla: la ropilla o jubón era la prenda que se llevaba sobre la camisa normalmente. Este tipo de prendas aglutina piezas de cuero, acolchadas de tela recia o liviana. Era muy común también que las mangas fueran de quita y pón.
Pantalones: Los pantalones del siglo de Oro tendieron a ensancharse y a incorporar botones tanto en el frontal para ceñirlo como en los laterales. Los pantalones Greguescos o Cervantinos (los de la imagen) son más propios del siglo XVI.
Tahalí/cinturón: Los cinturones de la época varían en tamaños y forma. Pero para ceñir la espada era muy común el uso del Tahalí que era básicamente un soporte hecho de varias tiras con hebillas que sujetaban la funda de la espada..
Zapato: El zapato era más propio de la vida civil que de la militar. Se usaba junto con una media hasta la rodilla y podían ir engalanados con enormes hebilla.
ARMADURAS
Borgoñota/ Yelmo/ Morrión: El casco era fundamental a la hora de entrar en combate, era lo primero que había que ponerse. Durante el siglo de Oro el capacete (primera imagen) fue el tipo de casco más popular y concretamente el morrión (segunda imagen) el más popular en España e Italia. La borgoñota (tercera imagen) es también contemporánea del siglo de Oro y desciende de los yelmos (cuarta imagen).
Coselete: El coselete a media armadura lo conforma un peto metálico y opcionalmente unos faldones. Se dejaron de usar protecciones especificas como las piernas metálicas para facilitar la movilidad sustituyéndose por grandes faldones que protegían la parte superior de las piernas.
Gorjal: El gorjal protege el cuello y es también una pieza fundamental para el soldado del tercio.
Hombreras: Solían ser poco comunes y normalmente eran llevados por los oficiales y gente de calidad que podía permitirse armaduras completas.
Brazos: Los brazos completos al igual que las hombreras solían estar exclusivamente en manos de gente de calidad y dinero. Sin embargo si que solían verse brazaletes de acero protegiendo los antebrazos de la infantería, normalmente en el brazo que quedaba más expuesto a las cuchilladas.
Cota de maya: Las cotas de maya completas dejaron de usarse debido a la reducción progresiva del armamento defensivo. Aunque no era raro ver algunas partes expuestas cubiertos por ella como brazos o antebrazos.
UNIFORMIDAD
El rojo: Este color era el del imperio español por aquella época, de modo que la mayoría de símbolos propios del tercio eran de ese color: Fajines, lazos, pañuelos, plumas......etc.
La cruz de San Andrés o Borgoñona: Emblema del ejercito español en su conjunto se cosía a la pechera de la prenda.
Pañuelo: El pañuelo muy común para enjuagarse el sudor, sujetar el pelo o como simple complemento estético, era de color rojo y se anudaba al brazo durante el combate para reconocerse de los soldados de otras naciones.
Camisa blanca: Durante las "encamisada" o ataques nocturnos muy propios del ejercito español se usaba la camisa blanca para reconocerse.
Fajín: Era común en la época llevar el fajín atado a la cintura. En el caso de los mandos era usado como símbolo de su cargo siendo este de color rojo y poniéndose cruzado al pecho o a la cintura.
EJEMPLOS DE VESTIMENTA Y UNIFORMIDAD
Paso a paso:
El soldado lleva pañuelo a la cabeza, camisa con cuello a la balona, pantalones acuchillados y botas de caña alta y cuero grueso dobladas a la altura de la rodilla. Lleva un pañuelo rojo atado al brazo para que lo distingan como soldado del tercio. Este sería el atuendo básico y el que se llevaría a una encamisada o correría nocturna.
Ahora viste un sombrero de ala ancha y con un jubón o ropilla de cuero sin mangas. Es un tipo de vestimenta más propio del verano y de la vida civil, aunque cada cual acudía a la batalla como le convenía. También se distingue la tela con la Cruz de San Andrés sobre el pecho como señal de que es soldado español. Esto es lo mínimo con lo que iría a una batalla, una pica seca recién alistada o que hubiera fundido todo su dinero en el juego.
El soldado lleva ahora una cuera con mangas (o sin mangas y por encima de un jubón con ellas) para protegerse de las cuchilladas ocasionales y que supone una buena protección durante la batalla para una pica seca.
La pica seca a dado paso al coselete que viste peto, escarcelas, gorjal y morrión. Un soldado de origen noble o de calidad armaría también brazos y hombreras.
Otros ejemplos:
Este oficial lleva camisa balona con un coleto largo similar a una cuera. Guantes de cuero grueso protegen sus manos del mismo modo que botas altas plegadas a la altura de la rodilla protegen sus piernas. Lleva sombrero de ala ancha y pantalones bombachos abotonados en los costados. La Cruz borgoñona al pecho y el fajín rojo lo señalan como oficial de Tercio.
Este coselete viste camisa, una camisa acuchillada y una cuera sin mangas, sobre la que ha colocado el peto con faldones. El gorjal y la borgoñota le cubren cuello y cabeza respectivamente y lleva un brazalete de acero en el brazo derecho por estar más expuesto a las cuchilladas. Las botas son de caña alta y de cuero recio y le protegen la pierna hasta que esta queda cubierta por la cuera y la escarcela.
4¿Las batallas de los Tercios?
1500
El asedio de Cefalonia y Sansón extremeño
El gran capitán reclamó hombres para recuperar Cefalonia, una ciudad de Grecia que había sido arrebatada por los turcos a la República de Venecia. Allí hizo presencia "el Sansón de Extremadura" Diego García de Paredes.
1503
La batalla de Ceriñola
El Gran Capitán cambió la historia de la guerra en su lucha contra Francia por el Reino de Nápoles. Y es que, si hasta ese momento la fuerza de los ejércitos se media en base a la cantidad de caballería pesada de la que se disponía, tras esta lid la mentalidad militar evolucionó y comenzó a primar la infantería.
1503
La batalla del Garellano
Fue la última batalla que dirigió personalmente Gonzalo Fernández de Córdoba, y donde dejó a los franceses completamente derrotados. En total, Francia registró 8.000 bajas entre prisioneros y muertos en esa jornada.
1521
La batalla de Villalar
La localidad vallisoletana fue testigo de la sangrienta contienda en la que los soldados de Carlos V aplastaron sin piedad al ejército comunero, contrario, entre otras cosas, a un rey que consideraban inexperto y que anteponía las necesidades alemanas a las españolas.
1525
La batalla de Pavía
En 1525, unos tercios aún sin formar derrotaron a la mejor caballería de Europa y capturaron al mismísimo Rey de Francia, Francisco I
1527
El saqueo de Roma
El suceso, al que fue ajeno Carlos V, tuvo un componente anticatólico, debido al gran número de mercenarios luteranos que integraban el ejército imperial. No se puede obviar, sin embargo, que hubo un importante grupo de españoles presentes en este oscuro suceso de la historia de Europa.
1539
La defensa de Castelnuovo
Eran apenas 3.000, pero tuvieron en jaque a todo el ejército turco. En Castelnuovo, los cristianos se enfrentaron hasta la muerte a 50.000 turcos.
1541
El desastre de Argel
El conquistador de México acompañó a Carlos I de España en una fracasada campaña contra el Norte de África, cuando el Monarca dio orden de retirada, el extremeño piidió 400 hombres para tomar en persona la ciudad.
1547
La batalla de Mühlberg
Un grupo de soldados españoles atravesó el río Elba bajo el intenso fuego enemigo para garantizar un paso seguro a sus compañeros. Con la victoria de sobre los protestantes alemanes, Carlos V alcanzó su cénit.
1557
La batalla de San Quintín
Fue uno de los más grandes enfrentamientos españoles contra el ejército de Francia que dio al entonces bisoño Felipe II una victoria decisiva. El Rey mandó construir su palacio del Escorial en honor a aquella gran victoria.
1558
La batalla de Gravelinas.
Lamoral Egmont, que posteriormente sería ejecutado por orden de Felipe II, encabezó a las tropas españolas en una batalla donde Francia fue desarmada definitivamente.
1560
El desastre de los Gelves
La campaña terminó con más de 10.000 muertos y 5.000 prisioneros, que fueron trasladados a Estambul. Hasta 1848, una pirámide de huesos y calaveras de los españoles estuvo visible en la isla de Túnez, a modo de advertencia.
1565
El Gran Rescate español a Malta
Durante cuatro meses, la Orden de Malta sufrió el ataque de la poderosa flota turca y de sus tropas de élite, en su mayoría jenízaros. Tras una defensa numantina, los malteses recuperaron el aliento cuando los tercios viejos desembarcaron.
1567
El Camino español
Creado en tiempos de Felipe II, el Camino español fue un hito logístico que permitió a España mantener una guerra a 1.500 kilómetros de Madrid y trasladar tropas en cuestión de un mes de Milán a Bruselas.
1568
La batalla de Gemmingen
El 21 de julio de 1568, en plena "Guerra de los 80 años", un ejército al mando del Duque de Alba hizo huir a Luis de Nassau y su contingente rebelde.
1568-1571
Lope de Figueroa, en la Guerra de las Alpujarras.
Las amenazas desde Madrid prendieron el levantamiento de los moriscos el día de Navidad de 1568, que se extendió por las escarpadas montañas granadinas. Don juan de Austria se llevó consigo al Capitán Lope de Figueroa, natural de Granada, para acabar con la rebelión.
1568
La quema de Heiligerlee
Durante el verano de 1568, el Tercio Viejo de Cerdeña fue disuelto después de que sus soldados quemasen varios pueblos de Heiligerlee en represalia por su resistencia.
1571
La batalla de Lepanto.
El 7 de octubre de 1571, la Santa Liga derrotó con sus buques a la flota de Selim II. Aunque la batalla fue marítima, los Tercios combatieron sobre galeras, prácticamente unas plataformas sobre el mar para cargar soldados.
1574
La batalla de Mock
El maestre de campo Sancho Davila obtuvo su mayor logro militar al frenar a Luis de Nassau en Mock. Por enésima vez en esa década, el hermano de Guillermo de Orange irrumpió desde Francia para atacar las provincias flamencas.
1576
El saqueo de Amberes
La propaganda holandesa se cuidó durante siglos de omitir que fue un incendio descontrolado el que arrasó casi un centenar de casas y no los actos de rapiña de los Tercios españoles.
1578
La batalla de Gembloux
Una arriesgada carga de caballería encabezada por Alejandro Farnesio sirvió para acabar con 25.000 rebeldes en los Países Bajos. Don Juan de Austria recriminó a su sobrino aquella actuación temeraria, pero tuvo que rendirse a su genio.
1578
Aldana y los españoles que lucharon en Alcazarquivir.
El poeta y soldado Francisco de Aldana murió el 4 de agosto de 1578 luchando contra los musulmanes en la batalla de Alcazarquivir. Era general de la infantería española en la desastrosa expedición que el Rey de Portugal, Sebastián condujo hasta Marruecos.
1585
El milagro de Empel
Las tropas hispanas sitiadas en la isla de Bommel lograron vencer a la muerte gracias a la repentina congelación de un río. El hecho fue atribuido a la Inmaculada Concepción.
1601
La aventura irlandesa de Juan del Águila
El abulense Juan del Águila y Arellano fue enviado en apoyo a los irlandeses sublevados contra Inglaterra en 1601. Tras aguantar meses en el asedio contra miles de ingleses en Castle Park, los españoles tuvieron que rendirse a causa de la falta de refuerzos locales.
1625
Calderón de la Barca y el asedio de Breda
Como vino a recordar la saga literaria de "El capitán Alatriste" en su tercera novela, es muy probable que Calderón de la Barca estuviera entre los soldados que asediaron con éxito la estratégica ciudad de Breda en 1625, o al menos que participara en alguna de sus fases.
1634
La batalla de Nördlingen
Una hueste de tropas internacionales católicas, en la que combatieron regimientos hispanos, logró acabar con la hegmonía protestante en Alemania durante la Guerra de los 30 años.
1643
La batalla de Rocroi
En el mal llamado ocaso de los Tercios nos dieron lo nuestro, pero aun despanzurrados y descoyuntados nosotros también les dimos lo suyo, exactamente hasta la última gota de sangre.
1658
Don Juan José y el ocaso de los Tercios
El hijo bastardo de Felipe IV estuvo presente en las principales batallas que marcaron el verdadero ocaso de los Tercios españoles, entre ellos la batalla de las Dunas. Allí, un ejército anglo-francés destrozó a uno español conducido por Juan José de Austria y Luis II de Condé.
Siglo XVI TODAS LAS BATALLAS
Hechos
ROJO--- Batallas perdidas
VERDE-Batallas ganadas
NEGRO-Batallas sin determinar
Asedio de Tarento (1501-1502)
Asedio de Canosa (1502)
Batalla de Seminara (1502)
Batalla de Ruvo (1503)
Batalla de Seminara (1503)
Batalla de Ceriñola (1503)
Batalla del Garellano (1503)
Jornada de Mazalquivir (1505)
Toma de Orán (1509)
Jornada de los Gelves (1510)
Batalla de Rávena (1512)
Batalla de Velate (1512)
Batalla de La Motta (1513)
Batalla de Centla (1519)
Batalla de Otumba (1520)
La Noche Triste (1520)
Batalla de Mactán (1521)
Batalla de Pamplona (1521)
Caída de México-Tenochtitlan (1521)
Batalla de Noáin (1521)
Asedio de la fortaleza de Fuenterrabía (1521 - 1524)
Batalla de Bicoca (1522)
Batalla de San Marcial (1522)
Batalla de Diriangén (1523)
Batalla del Sesia (1524)
Batalla de Acajutla (1524)
Batalla de Pavía (1525)
Saco de Roma (1527)
Batalla de Landriano (1529)
Sitio de Florencia (1529-1530)
Batalla de Gavinana (1530)
Batalla de Cajamarca (1532)
Tercera batalla de Tiocajas (1534)
Jornada de Túnez (1535)
Batalla de Sacsayhuamán (1536)
Cerco de Lima (1536)
Batalla de Reinohuelén (1536)
Batalla de Ollantaytambo (1537)
Batalla de Tocarema (1537)
Batalla de Préveza (1538)
Asedio de Castelnuovo (1539)
Batalla de la Isla de Alborán (1540)
Batalla del río Mapocho (1541)
Batalla de Aconcagua (1541)
Conquista de la fortaleza de Paidahuén (1541)
Destrucción de la mina Marga Marga y de un barco (1541)
Destrucción de Santiago (1541)
Jornada de Argel (1541)
Batalla de Muros (1543)
Sitio de Niza (1543)
Combate de Cachapoal (1544)
Combate de Maipo (1544)
Batalla de Cerisoles (1544)
Batalla de Serravalle (1544)
Combate en el Limarí (1544)
Batalla de Quilacura (1546)
Batalla de Mühlberg (1547)
Destrucción de La Serena (1549)
Batalla de Andalien (1550)
Batalla de Penco (1550)
Toma de Mahdía (1550)
Catorce de la fama (1553)
Batalla de Tucapel (1553 ó 1554)
Batalla de Marihueñu (1554)
Combate de Chiloé (1554)
Batalla de Marciano (1554)
Segunda destrucción de Concepción (1555)
Batalla de Peteroa (1556)
Batalla de Mataquito (1557)
Batalla de San Quintín (1557)
Batalla del Fuerte San Luis (1557)
Batalla de Lagunillas (1557)
Batalla de Millarapue (1557)
Batalla de Cayucupil (1558)
Batalla del Fuerte de Cañete (1558)
Batalla de Wadi al-Laban (1558)
Batalla de Gravelinas (1558)
Batalla de Quiapo (1558)
Batalla del Fuerte de Arauco (1558)
Batalla de Los Gelves (1560)
Batalla de Dreux (1562)
Combate de Catiray (1563)
Batalla del Fuerte Lincoya (1563)
Primer Sitio al Fuerte de Arauco (1563)
Sitio de Orán y Mazalquivir (1563)
Segundo Sitio al Fuerte de Arauco (1563)
Batalla de Angol (1564)
Sitio de Malta (1565)
Asedio de Valenciennes (1566)
Batalla de Oosterweel (1567)
Batalla de Maracapana (1567 ó 1568)
Batalla de Dalen (1568)
Batalla de Heiligerlee (1568)
Batalla de Jemmingen (1568)
Batalla de San Juan de Ulúa (1568)
Batalla de Jodoigne (1568)
Batalla de Catiray (1569)
Batalla del Peñón de Frigiliana (1569)
Batalla de Purén (1570)
Batalla de Lepanto (1571)
Asedio de Mons (1572)
Socorro de Goes (1572)
Asedio de Haarlem (1572-1573)
Batalla de Flesinga (1573)
Asedio de Alkmaar (1573)
Batalla del Zuiderzee (1573)
Asedio de Leiden (1573-1574)
Batalla de Reimerswaal (1574)
Batalla de Mook (1574)
Asedio de Zierikzee (1576)
Saqueo de Amberes(1576)
Batalla de Gembloux (1578)
Sitio de Maastricht (1579)
Batalla de Alcántara (1580)
Toma de Oporto (1580)
Batalla de Noordhorn (1581)
Combates de Cagayán (1582)
Batalla de la Isla Terceira (1582)
Sitio de Amberes (1584-1585)
Milagro de Empel (1585)
Toma de Santo Domingo (1586)
Batalla de Zutphen (1586)
Expedición de Drake (1587)
Primer asedio de Bergen op Zoom (1588)
Armada Invencible (1588)
Invencible Inglesa (1589)
Batalla del Golfo de Almería (1591)
Batalla del golfo de Vizcaya (1592)
Batalla de Blaye (1593)
Batalla de Cornualles (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Islas Canarias) (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Isla Guadalupe) (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (San Juan de Puerto Rico) (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Panama) (1596)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Isla de Pinos) (1596)
Toma y saqueo de Cádiz (1596)
Batalla de Turnhout (1597)
Batalla de Curalaba (1598)
Batalla de Quilacoya (1599)
Hechos sin clasificar
Batallas entre españoles
Sitio de Gibraltar (1506)
Saqueo de Niebla (1508)
Guerra de las comunidades de Castilla
La Batalla de Tordesillas (1520)
La Batalla de Torrelobatón (1521)
Batalla de Villalar (1521)
Rebelión de las Germanías
Batalla del castillo de Corbera (1521)
Batalla de Oropesa (1521)
Batalla de Almenara (1521)
Batalla de Gandía (1521)
Batalla de Orihuela (1521)
Batalla de Alcira (1521 - 1522)
Guerra civil entre los conquistadores del Perú
Sitio de Cuzco (1536 - 1537)
Batalla de las Salinas (1538)
Batalla de Chupas (1542)
Batalla de Iñaquito (1546)
Batalla de Huarina (1547)
Batalla de Jaquijahuana (1548)
Ataques a posesiones sin guarnición
Matanza de Cholula (1519)
Masacre de Calacoaya (1520)
Matanza de Tóxcatl (1520)
Primera Destrucción de Concepción (1555)
Toma de Brielle (1572)
Toma de Flesinga (1572)
Saqueo de Malinas (1572)
Ataque a Amberes (1583)
Guarnición alemana
Sitio de Breda (1577)
Guarnición italiana
Toma de Breda (1590)
Sin consecuencias
Armada española de intervención en Irlanda (1596)
Invasión española de Inglaterra (1597)
Escasa información
Destrucción de las Siete Ciudades (1599 - 1604)
Fuente
Estadísticas
140 hechos en total
99 victorias
41 derrotas
70,71% de victorias.
1. ¿Origen de los Tercios?
Aunque fueron oficialmente creados por Carlos I, tras la reforma del ejercito, como guarnición de las posesiones españolas en Italia y para operaciones expedicionarias en el Mediterráneo, sus orígenes se remontan probablemente a las tropas de Gonzalo Fernandez de Córdoba en Italia. Con estas tropas españolas asentadas en Italia, Carlos I en sus ordenanzas de 1534 y 1536 organizaba su ejercito en tres tercios: uno en el reino de Sicilia, otro en el ducado de Milán y otro en el reino de Nápoles. En realidad, se comenzaron a gestar en el península. Durante el reinado de los Reyes Católicos y a consecuencia de la guerra de Granada, se adoptó el modelo de los piqueros suizos, poco después se repartían las tropas en tres clases; piqueros, escudados (espadachines) y ballesteros mezclados con las primeras armas de fuego portátiles (espingarderos y escopeteros). No tardaron mucho en desaparecer los escudados y pasar los hombres con armas de fuego de ser un complemento de las ballestas a sustituirlas por completo. Las victorias españolas en Italia frente a los poderosos ejércitos franceses tuvieron lugar cuando todavía no se había completado el proceso.
2. ¿Armas de los Tercios?
Canción de los tercios
Disparo
-Arcabuz. Fueron aumentando su número de ser una tercera parte de los efectivos a principios de sigilo XVI hasta suponer el 80% a finales de siglo. El arcabuz era un arma de fuego de un tamaño de 90 y 130 cm ( un peso de 7 kg), que disparaba proyectiles de 19 a 30 mm de diámetro. A través de un sencillo mecanismo de disparo, los proyectiles salían a una velocidad de 200 metros por segundo, aunque, al tratarse de un arma muy imprecisa, su alcance efectivo no sobrepasaba los 30 metros en el mejor de los casos.
Los arcabuceros españoles eran muy valorados por su disciplina. Incontables son las ocasiones en la que una descarga de proyectiles, procedente de una improvisada formación, determinó una batalla en curso.
Las 12 cargas que los arcabuceros portaban sobre el hombro, y que luego emplean para realizar las recargas, recibían el nombre de los 12 Apóstoles
-Mosquete. El Duque de Alba, fue el primero en introducir mosquetes en los Tercios de Flandes, ante los problemas que arrastraban los arcabuces. El mosquete permitía mucha mayor distancia de tiro, unos 200 metros y era efectivo a 50 metros, también tenía sus contras: su peso era de 10 kg y su longitud de 125 a 150 cm, lo cual obligaba al soldado a prescindir del morrión, "por eso se hizo tan popular el gorro de mosquetero" y a emplear una horquilla para disparar el arma. Su elevado coste hizo imposible la ambición de sustituir todos los arcabuces, pero su número no dejo de aumentar durante todo el periodo-
Armas de asta
-La pica. Si hay un arma que representa el espíritu de los Tercios esa es la pica. A mediados del siglo XV las infanterías europeas recuperaron las lanzas para el combate. La pica moderna, tumba de la caballería medieval, tenía una envergadura de 5,5 metros y cuya longitud era mucho mayor a 22 pies.
Las picas españolas se fabricaban, preferentemente con fresno vizcaíno -de gran flexibilidad- y tenían un peso de 5 kg.
Los mercenarios suizos fueron los primeros en recuperar la pica en escuadrones compactos, sin embargo los tercios no eran una unidad de combate sino de encuadramiento, con capacidad para fragmentarse en un sinfín de variedades.La pica encajó al dedillo en la Península Ibérica donde la infantería gozaba de una larga tradición.
Todo nuevo soldado de los tercios, los bisoños, entraban como pica seca, lo cual implicaba portar pica sin ningún tipo de protección. Con el paso de las campañas, el bisoño se iba haciendo con más equipamiento e incluso podía as pirar a portar arcabuz si quedaban plazas vacantes.
Hasta su progresiva desaparición -sustituidas por bayonetas- las picas obligaron a replantear las prestaciones de la caballería pesada, que había quedado solapada bajo un bosque de picas.
-La semipica. Idéntica a su hermana mayor, pero de menos longitud, su uso quedaba reducido a las primeras filas, y los tercios embarcados los cuales tenían que combatir en espacios muy estrechos.
-Otras armas de asta. Una gran variedad de armas de asta, con diferentes nombres según la "cabeza", quedaban reservadas para el uso y distinción de los oficiales y suboficiales. El capitán portaba una jineta terminada en una hoja corta ovalada, adornada con una borla con flecos y lazos, que recibía el nombre de esponton. Los sargentos portaban alabardas siempre con un lado de hacha de filo curvado -para distinguir su estatus-. Por su parte, los cabos podían llevar partesana -alabarda modesta sin adornos-.
La alabarda también era usada por la guardia del maestre de campo y del propio general. De hecho durante siglos fue el arma preferente de las guardias reales de toda Europa.
Armas de combate cuerpo a cuerpo.
-Espada ropera. Cuando el fuego y las picas se hacían a un lado, prendía el baile de aceros. Llegado el choque de escuadras, los castellanos hábiles espadachines, muchos ungidos en las calles de Madrid, podían marcar la diferencia entre la victoria y la derrota. Para su uso se requería de una alta dosis de vista, agilidad y destreza.
A diferencia de las espadas medievales, diseñadas para cercenar miembros, las del periodo renacentista eran ligeras y se empleaban para batirse, en duelo. La lucha se efectuaba de perfil para reducir el blanco y exigía mucha movilidad. Por ese mismo motivo, en vez de contar solo con gavilanes -la forma de cruz de las espadas medievales-, tenían un tazón o cazoleta que reducía el peso. Precisamente estos tazones, objeto de ornamentos y figuras talladas convertían en obras de arte a muchas de esas espadas. En el caso de los gavilanes usados a partir del siglo XV se aprecia una reducción de peso y tamaño.
Las espadas toledanas tenían fama mundial; asimismo, se hacían excelentes aceros en Zaragoza, Calatayud, Cataluña, Bilbao, Segovia y Valencia.
En sus orígenes, los tercios llevaban un 20% de soldados armados con rodela y espada; la tendencia fue a suprimir la rodela y a equipar a todos los soldados -arcabuceros, mosqueteros y piqueros- con espadas roperas.
-Vizcaína."Se baten espada en mano, no retroceden jamás; paran el golpe con el puñal y cuando hacen con él el gesto de tirar al cuerpo debéis desconfiar de la cuchillada, y cuando os amenazan el cuerpo". Los soldados españoles acostumbraban a portar espada ropera en una mano y una daga mediana en la otra. En concreto, la daga usada por los españoles era de hoja triangular y con la empuñadura protegida por un triángulo de metal abombado en forma de vela.
3¿Que vestimenta tenían los Tercios?
ROPA
Botas: Muy populares entre los soldados por su comodidad y resistencia.
Camisa: Los cuellos a la balona (la segunda foto) estaban muy de moda, las camisas de cuello recto tan populares . Los acuchillados son mas característicos del XVI que del XVII.
Casaca: La casaca suele ser en este periodo mas propia de oficiales y gente de calidad, siendo una especie de chaquetón largo con amplias mangas.
Chambergo/sombrero de ala ancha: Este tipo de sombrero de ala ancha que en su forma mas modesta y simple se llamaba capelina y que solía llevar enormes plumas de colores y hebillas estaba muy a la moda en la época. Protegía del sol, quedaba muy bravo y además no era mala protección para la cabeza durante el duelo ya que estorbaba bastante a las cuchilladas.
Coleto: Prenda destinada a la protección podía estar hecho desde piel cruda hasta ante.
Cuera: La cuera fue la prenda sustituta del gambesón durante el siglo de Oro. Hecha de ante o seraje se portaba bajo la armadura para llevarla de forma mas cómoda, aunque era por si sola una muy buena opción defensiva para llevar a la guerra.
Jubón/ropilla: la ropilla o jubón era la prenda que se llevaba sobre la camisa normalmente. Este tipo de prendas aglutina piezas de cuero, acolchadas de tela recia o liviana. Era muy común también que las mangas fueran de quita y pón.
Pantalones: Los pantalones del siglo de Oro tendieron a ensancharse y a incorporar botones tanto en el frontal para ceñirlo como en los laterales. Los pantalones Greguescos o Cervantinos (los de la imagen) son más propios del siglo XVI.
Tahalí/cinturón: Los cinturones de la época varían en tamaños y forma. Pero para ceñir la espada era muy común el uso del Tahalí que era básicamente un soporte hecho de varias tiras con hebillas que sujetaban la funda de la espada..
Zapato: El zapato era más propio de la vida civil que de la militar. Se usaba junto con una media hasta la rodilla y podían ir engalanados con enormes hebilla.
ARMADURAS
Borgoñota/ Yelmo/ Morrión: El casco era fundamental a la hora de entrar en combate, era lo primero que había que ponerse. Durante el siglo de Oro el capacete (primera imagen) fue el tipo de casco más popular y concretamente el morrión (segunda imagen) el más popular en España e Italia. La borgoñota (tercera imagen) es también contemporánea del siglo de Oro y desciende de los yelmos (cuarta imagen).
Gorjal: El gorjal protege el cuello y es también una pieza fundamental para el soldado del tercio.
Hombreras: Solían ser poco comunes y normalmente eran llevados por los oficiales y gente de calidad que podía permitirse armaduras completas.
Brazos: Los brazos completos al igual que las hombreras solían estar exclusivamente en manos de gente de calidad y dinero. Sin embargo si que solían verse brazaletes de acero protegiendo los antebrazos de la infantería, normalmente en el brazo que quedaba más expuesto a las cuchilladas.
Cota de maya: Las cotas de maya completas dejaron de usarse debido a la reducción progresiva del armamento defensivo. Aunque no era raro ver algunas partes expuestas cubiertos por ella como brazos o antebrazos.
UNIFORMIDAD
El rojo: Este color era el del imperio español por aquella época, de modo que la mayoría de símbolos propios del tercio eran de ese color: Fajines, lazos, pañuelos, plumas......etc.
La cruz de San Andrés o Borgoñona: Emblema del ejercito español en su conjunto se cosía a la pechera de la prenda.
Pañuelo: El pañuelo muy común para enjuagarse el sudor, sujetar el pelo o como simple complemento estético, era de color rojo y se anudaba al brazo durante el combate para reconocerse de los soldados de otras naciones.
Camisa blanca: Durante las "encamisada" o ataques nocturnos muy propios del ejercito español se usaba la camisa blanca para reconocerse.
Fajín: Era común en la época llevar el fajín atado a la cintura. En el caso de los mandos era usado como símbolo de su cargo siendo este de color rojo y poniéndose cruzado al pecho o a la cintura.
EJEMPLOS DE VESTIMENTA Y UNIFORMIDAD
Paso a paso:
El soldado lleva pañuelo a la cabeza, camisa con cuello a la balona, pantalones acuchillados y botas de caña alta y cuero grueso dobladas a la altura de la rodilla. Lleva un pañuelo rojo atado al brazo para que lo distingan como soldado del tercio. Este sería el atuendo básico y el que se llevaría a una encamisada o correría nocturna.
Ahora viste un sombrero de ala ancha y con un jubón o ropilla de cuero sin mangas. Es un tipo de vestimenta más propio del verano y de la vida civil, aunque cada cual acudía a la batalla como le convenía. También se distingue la tela con la Cruz de San Andrés sobre el pecho como señal de que es soldado español. Esto es lo mínimo con lo que iría a una batalla, una pica seca recién alistada o que hubiera fundido todo su dinero en el juego.
El soldado lleva ahora una cuera con mangas (o sin mangas y por encima de un jubón con ellas) para protegerse de las cuchilladas ocasionales y que supone una buena protección durante la batalla para una pica seca.
La pica seca a dado paso al coselete que viste peto, escarcelas, gorjal y morrión. Un soldado de origen noble o de calidad armaría también brazos y hombreras.
Otros ejemplos:
Este oficial lleva camisa balona con un coleto largo similar a una cuera. Guantes de cuero grueso protegen sus manos del mismo modo que botas altas plegadas a la altura de la rodilla protegen sus piernas. Lleva sombrero de ala ancha y pantalones bombachos abotonados en los costados. La Cruz borgoñona al pecho y el fajín rojo lo señalan como oficial de Tercio.
Este coselete viste camisa, una camisa acuchillada y una cuera sin mangas, sobre la que ha colocado el peto con faldones. El gorjal y la borgoñota le cubren cuello y cabeza respectivamente y lleva un brazalete de acero en el brazo derecho por estar más expuesto a las cuchilladas. Las botas son de caña alta y de cuero recio y le protegen la pierna hasta que esta queda cubierta por la cuera y la escarcela.
4¿Las batallas de los Tercios?
1500
El asedio de Cefalonia y Sansón extremeño
El gran capitán reclamó hombres para recuperar Cefalonia, una ciudad de Grecia que había sido arrebatada por los turcos a la República de Venecia. Allí hizo presencia "el Sansón de Extremadura" Diego García de Paredes.
1503
La batalla de Ceriñola
El Gran Capitán cambió la historia de la guerra en su lucha contra Francia por el Reino de Nápoles. Y es que, si hasta ese momento la fuerza de los ejércitos se media en base a la cantidad de caballería pesada de la que se disponía, tras esta lid la mentalidad militar evolucionó y comenzó a primar la infantería.
1503
La batalla del Garellano
Fue la última batalla que dirigió personalmente Gonzalo Fernández de Córdoba, y donde dejó a los franceses completamente derrotados. En total, Francia registró 8.000 bajas entre prisioneros y muertos en esa jornada.
1521
La batalla de Villalar
La localidad vallisoletana fue testigo de la sangrienta contienda en la que los soldados de Carlos V aplastaron sin piedad al ejército comunero, contrario, entre otras cosas, a un rey que consideraban inexperto y que anteponía las necesidades alemanas a las españolas.
1525
La batalla de Pavía
En 1525, unos tercios aún sin formar derrotaron a la mejor caballería de Europa y capturaron al mismísimo Rey de Francia, Francisco I
1527
El saqueo de Roma
El suceso, al que fue ajeno Carlos V, tuvo un componente anticatólico, debido al gran número de mercenarios luteranos que integraban el ejército imperial. No se puede obviar, sin embargo, que hubo un importante grupo de españoles presentes en este oscuro suceso de la historia de Europa.
1539
La defensa de Castelnuovo
Eran apenas 3.000, pero tuvieron en jaque a todo el ejército turco. En Castelnuovo, los cristianos se enfrentaron hasta la muerte a 50.000 turcos.
1541
El desastre de Argel
El conquistador de México acompañó a Carlos I de España en una fracasada campaña contra el Norte de África, cuando el Monarca dio orden de retirada, el extremeño piidió 400 hombres para tomar en persona la ciudad.
1547
La batalla de Mühlberg
Un grupo de soldados españoles atravesó el río Elba bajo el intenso fuego enemigo para garantizar un paso seguro a sus compañeros. Con la victoria de sobre los protestantes alemanes, Carlos V alcanzó su cénit.
1557
La batalla de San Quintín
Fue uno de los más grandes enfrentamientos españoles contra el ejército de Francia que dio al entonces bisoño Felipe II una victoria decisiva. El Rey mandó construir su palacio del Escorial en honor a aquella gran victoria.
1558
La batalla de Gravelinas.
Lamoral Egmont, que posteriormente sería ejecutado por orden de Felipe II, encabezó a las tropas españolas en una batalla donde Francia fue desarmada definitivamente.
1560
El desastre de los Gelves
La campaña terminó con más de 10.000 muertos y 5.000 prisioneros, que fueron trasladados a Estambul. Hasta 1848, una pirámide de huesos y calaveras de los españoles estuvo visible en la isla de Túnez, a modo de advertencia.
1565
El Gran Rescate español a Malta
Durante cuatro meses, la Orden de Malta sufrió el ataque de la poderosa flota turca y de sus tropas de élite, en su mayoría jenízaros. Tras una defensa numantina, los malteses recuperaron el aliento cuando los tercios viejos desembarcaron.
1567
El Camino español
Creado en tiempos de Felipe II, el Camino español fue un hito logístico que permitió a España mantener una guerra a 1.500 kilómetros de Madrid y trasladar tropas en cuestión de un mes de Milán a Bruselas.
1568
La batalla de Gemmingen
El 21 de julio de 1568, en plena "Guerra de los 80 años", un ejército al mando del Duque de Alba hizo huir a Luis de Nassau y su contingente rebelde.
1568-1571
Lope de Figueroa, en la Guerra de las Alpujarras.
Las amenazas desde Madrid prendieron el levantamiento de los moriscos el día de Navidad de 1568, que se extendió por las escarpadas montañas granadinas. Don juan de Austria se llevó consigo al Capitán Lope de Figueroa, natural de Granada, para acabar con la rebelión.
1568
La quema de Heiligerlee
Durante el verano de 1568, el Tercio Viejo de Cerdeña fue disuelto después de que sus soldados quemasen varios pueblos de Heiligerlee en represalia por su resistencia.
1571
La batalla de Lepanto.
El 7 de octubre de 1571, la Santa Liga derrotó con sus buques a la flota de Selim II. Aunque la batalla fue marítima, los Tercios combatieron sobre galeras, prácticamente unas plataformas sobre el mar para cargar soldados.
1574
La batalla de Mock
El maestre de campo Sancho Davila obtuvo su mayor logro militar al frenar a Luis de Nassau en Mock. Por enésima vez en esa década, el hermano de Guillermo de Orange irrumpió desde Francia para atacar las provincias flamencas.
1576
El saqueo de Amberes
La propaganda holandesa se cuidó durante siglos de omitir que fue un incendio descontrolado el que arrasó casi un centenar de casas y no los actos de rapiña de los Tercios españoles.
1578
La batalla de Gembloux
Una arriesgada carga de caballería encabezada por Alejandro Farnesio sirvió para acabar con 25.000 rebeldes en los Países Bajos. Don Juan de Austria recriminó a su sobrino aquella actuación temeraria, pero tuvo que rendirse a su genio.
1578
Aldana y los españoles que lucharon en Alcazarquivir.
El poeta y soldado Francisco de Aldana murió el 4 de agosto de 1578 luchando contra los musulmanes en la batalla de Alcazarquivir. Era general de la infantería española en la desastrosa expedición que el Rey de Portugal, Sebastián condujo hasta Marruecos.
1585
El milagro de Empel
Las tropas hispanas sitiadas en la isla de Bommel lograron vencer a la muerte gracias a la repentina congelación de un río. El hecho fue atribuido a la Inmaculada Concepción.
1601
La aventura irlandesa de Juan del Águila
El abulense Juan del Águila y Arellano fue enviado en apoyo a los irlandeses sublevados contra Inglaterra en 1601. Tras aguantar meses en el asedio contra miles de ingleses en Castle Park, los españoles tuvieron que rendirse a causa de la falta de refuerzos locales.
1625
Calderón de la Barca y el asedio de Breda
Como vino a recordar la saga literaria de "El capitán Alatriste" en su tercera novela, es muy probable que Calderón de la Barca estuviera entre los soldados que asediaron con éxito la estratégica ciudad de Breda en 1625, o al menos que participara en alguna de sus fases.
1634
La batalla de Nördlingen
Una hueste de tropas internacionales católicas, en la que combatieron regimientos hispanos, logró acabar con la hegmonía protestante en Alemania durante la Guerra de los 30 años.
1643
La batalla de Rocroi
En el mal llamado ocaso de los Tercios nos dieron lo nuestro, pero aun despanzurrados y descoyuntados nosotros también les dimos lo suyo, exactamente hasta la última gota de sangre.
1658
Don Juan José y el ocaso de los Tercios
El hijo bastardo de Felipe IV estuvo presente en las principales batallas que marcaron el verdadero ocaso de los Tercios españoles, entre ellos la batalla de las Dunas. Allí, un ejército anglo-francés destrozó a uno español conducido por Juan José de Austria y Luis II de Condé.
Siglo XVI TODAS LAS BATALLAS
Hechos
ROJO--- Batallas perdidas
VERDE-Batallas ganadas
NEGRO-Batallas sin determinar
Asedio de Tarento (1501-1502)
Asedio de Canosa (1502)
Batalla de Seminara (1502)
Batalla de Ruvo (1503)
Batalla de Seminara (1503)
Batalla de Ceriñola (1503)
Batalla del Garellano (1503)
Jornada de Mazalquivir (1505)
Toma de Orán (1509)
Jornada de los Gelves (1510)
Batalla de Rávena (1512)
Batalla de Velate (1512)
Batalla de La Motta (1513)
Batalla de Centla (1519)
Batalla de Otumba (1520)
La Noche Triste (1520)
Batalla de Mactán (1521)
Batalla de Pamplona (1521)
Caída de México-Tenochtitlan (1521)
Batalla de Noáin (1521)
Asedio de la fortaleza de Fuenterrabía (1521 - 1524)
Batalla de Bicoca (1522)
Batalla de San Marcial (1522)
Batalla de Diriangén (1523)
Batalla del Sesia (1524)
Batalla de Acajutla (1524)
Batalla de Pavía (1525)
Saco de Roma (1527)
Batalla de Landriano (1529)
Sitio de Florencia (1529-1530)
Batalla de Gavinana (1530)
Batalla de Cajamarca (1532)
Tercera batalla de Tiocajas (1534)
Jornada de Túnez (1535)
Batalla de Sacsayhuamán (1536)
Cerco de Lima (1536)
Batalla de Reinohuelén (1536)
Batalla de Ollantaytambo (1537)
Batalla de Tocarema (1537)
Batalla de Préveza (1538)
Asedio de Castelnuovo (1539)
Batalla de la Isla de Alborán (1540)
Batalla del río Mapocho (1541)
Batalla de Aconcagua (1541)
Conquista de la fortaleza de Paidahuén (1541)
Destrucción de la mina Marga Marga y de un barco (1541)
Destrucción de Santiago (1541)
Jornada de Argel (1541)
Batalla de Muros (1543)
Sitio de Niza (1543)
Combate de Cachapoal (1544)
Combate de Maipo (1544)
Batalla de Cerisoles (1544)
Batalla de Serravalle (1544)
Combate en el Limarí (1544)
Batalla de Quilacura (1546)
Batalla de Mühlberg (1547)
Destrucción de La Serena (1549)
Batalla de Andalien (1550)
Batalla de Penco (1550)
Toma de Mahdía (1550)
Catorce de la fama (1553)
Batalla de Tucapel (1553 ó 1554)
Batalla de Marihueñu (1554)
Combate de Chiloé (1554)
Batalla de Marciano (1554)
Segunda destrucción de Concepción (1555)
Batalla de Peteroa (1556)
Batalla de Mataquito (1557)
Batalla de San Quintín (1557)
Batalla del Fuerte San Luis (1557)
Batalla de Lagunillas (1557)
Batalla de Millarapue (1557)
Batalla de Cayucupil (1558)
Batalla del Fuerte de Cañete (1558)
Batalla de Wadi al-Laban (1558)
Batalla de Gravelinas (1558)
Batalla de Quiapo (1558)
Batalla del Fuerte de Arauco (1558)
Batalla de Los Gelves (1560)
Batalla de Dreux (1562)
Combate de Catiray (1563)
Batalla del Fuerte Lincoya (1563)
Primer Sitio al Fuerte de Arauco (1563)
Sitio de Orán y Mazalquivir (1563)
Segundo Sitio al Fuerte de Arauco (1563)
Batalla de Angol (1564)
Sitio de Malta (1565)
Asedio de Valenciennes (1566)
Batalla de Oosterweel (1567)
Batalla de Maracapana (1567 ó 1568)
Batalla de Dalen (1568)
Batalla de Heiligerlee (1568)
Batalla de Jemmingen (1568)
Batalla de San Juan de Ulúa (1568)
Batalla de Jodoigne (1568)
Batalla de Catiray (1569)
Batalla del Peñón de Frigiliana (1569)
Batalla de Purén (1570)
Batalla de Lepanto (1571)
Asedio de Mons (1572)
Socorro de Goes (1572)
Asedio de Haarlem (1572-1573)
Batalla de Flesinga (1573)
Asedio de Alkmaar (1573)
Batalla del Zuiderzee (1573)
Asedio de Leiden (1573-1574)
Batalla de Reimerswaal (1574)
Batalla de Mook (1574)
Asedio de Zierikzee (1576)
Saqueo de Amberes(1576)
Batalla de Gembloux (1578)
Sitio de Maastricht (1579)
Batalla de Alcántara (1580)
Toma de Oporto (1580)
Batalla de Noordhorn (1581)
Combates de Cagayán (1582)
Batalla de la Isla Terceira (1582)
Sitio de Amberes (1584-1585)
Milagro de Empel (1585)
Toma de Santo Domingo (1586)
Batalla de Zutphen (1586)
Expedición de Drake (1587)
Primer asedio de Bergen op Zoom (1588)
Armada Invencible (1588)
Invencible Inglesa (1589)
Batalla del Golfo de Almería (1591)
Batalla del golfo de Vizcaya (1592)
Batalla de Blaye (1593)
Batalla de Cornualles (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Islas Canarias) (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Isla Guadalupe) (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (San Juan de Puerto Rico) (1595)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Panama) (1596)
Ataques de Drake y Hawkins contra la América Española (Isla de Pinos) (1596)
Toma y saqueo de Cádiz (1596)
Batalla de Turnhout (1597)
Batalla de Curalaba (1598)
Batalla de Quilacoya (1599)
Hechos sin clasificar
Batallas entre españoles
Sitio de Gibraltar (1506)
Saqueo de Niebla (1508)
Guerra de las comunidades de Castilla
La Batalla de Tordesillas (1520)
La Batalla de Torrelobatón (1521)
Batalla de Villalar (1521)
Rebelión de las Germanías
Batalla del castillo de Corbera (1521)
Batalla de Oropesa (1521)
Batalla de Almenara (1521)
Batalla de Gandía (1521)
Batalla de Orihuela (1521)
Batalla de Alcira (1521 - 1522)
Guerra civil entre los conquistadores del Perú
Sitio de Cuzco (1536 - 1537)
Batalla de las Salinas (1538)
Batalla de Chupas (1542)
Batalla de Iñaquito (1546)
Batalla de Huarina (1547)
Batalla de Jaquijahuana (1548)
Ataques a posesiones sin guarnición
Matanza de Cholula (1519)
Masacre de Calacoaya (1520)
Matanza de Tóxcatl (1520)
Primera Destrucción de Concepción (1555)
Toma de Brielle (1572)
Toma de Flesinga (1572)
Saqueo de Malinas (1572)
Ataque a Amberes (1583)
Guarnición alemana
Sitio de Breda (1577)
Guarnición italiana
Toma de Breda (1590)
Sin consecuencias
Armada española de intervención en Irlanda (1596)
Invasión española de Inglaterra (1597)
Escasa información
Destrucción de las Siete Ciudades (1599 - 1604)
Fuente
Estadísticas
140 hechos en total
99 victorias
41 derrotas
70,71% de victorias.
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